Polémica medida empresarial del comediógrafo

El creador del Perro Guarumo, Oscar Burgos, reveló durante una participación en 2024 en el programa digital Sinergéticos que sus empleados están sujetos a una política única: la infidelidad amorosa constituye causa de despido. Esta declaración, originariamente difundida en un podcast, recientemente alcanzó difusión masiva en plataformas sociales.

El comediógrafo originario de Tampico explicó que mientras permite cierta flexibilidad en relaciones no formales, establece una línea clara respecto a las esposas: “les tengo estrictamente prohibido engañar a su esposa o novia”. Burgos justificó esta política con base en su ascendencia siciliana, sosteniendo que quien engaña a su pareja demuestra una falta de lealtad que inevitablemente afectará otras áreas de su vida profesional.

Despido por incumplimiento de norma

El empresario cultural confirmó que esta regla no es meramente simbólica: “Creo que la lealtad de la familia es muy importante; a mi un gerente de mis bares, si sé que trae una movida… y ya me pasó, tuve que despedir a un gerente que tenía muchos años conmigo”. La violación específica identificada fue la desviación de recursos económicos hacia una tercera persona, lo que Burgos interpretó como una prueba de doble engaño: hacia la esposa e institucional.

La justificación del despedido radicó en un razonamiento directo: “Le dije: Oye estás engañando a tu esposa y me estás engañando a mí, porque ahora necesitas más dinero, ¿y de dónde lo vas a agarrar? Del bar. ¡Pues no!’

Extensión a ámbito familiar

Este criterio de fidelidad trasciende el entorno laboral, aplicándose también a su vida privada: “Está prohibido y mis hijos también. A Oscar se lo tengo bien clarito: si usted trae novia, hasta que no termine con ella puede salir con otra muchacha, porque entonces no voy a confiar en ti”. Para Burgos, la honestidad en las relaciones románticas establece un patrón ético fundamental que determina la confiabilidad en otros aspectos de la vida: “No puedes andar engañando ni a tu novia ni a tu esposa, porque entonces engañas a todas las personas y robas”.

Más de 300 habitantes de Tulancingo de Bravo, desde niños de 8 años hasta adultos mayores, participan en diversas formaciones educativas ofrecidas por la administración local a través de siete Centros de Desarrollo Comunitario.

Modalidades de enseñanza accesible

El director de Desarrollo Comunitario, Ricardo Luqueño Romero, explicó que “la formación a la ciudadanía en artes y oficios se realiza en algunos casos de forma gratuita” gracias al personal interno de la dirección. Para otras opciones se cuenta con instructores externos que ofrecen precios económicos y programas certificados en alianza con el Instituto de Capacitación para el Trabajo de Hidalgo.

La presidenta municipal Lorena García Cázares impulsa este programa educativo comunitario como parte de las políticas sociales del gobierno local. Las inscripciones permanecen abiertas durante todo el año.

Ofertas académicas y servicios complementarios

Entre las actividades más solicitadas se encuentran baile fitness, arte infantil, cocina y cursos de belleza. Próximamente se incrementará la variedad de opciones educativas enfocadas en oficios emergentes que representen oportunidades laborales.

Además de las formaciones, los espacios comunitarios proporcionan servicios de salud como psicología, nutrición, podología y terapia física. Los centros operan en las colonias Jaltepec, Ahuehuetitla, Napateco, Cañada, Guadalupe, Metilatla y Paraíso.

Acceso a información y recursos adicionales

Para registrarse o obtener detalles, la población puede visitar directamente cualquiera de los siete centros o acudir a la secretaría de Desarrollo Humano y Social ubicada en el segundo piso de la presidencia municipal. También está disponible el número telefónico 7757558450 extensión 1135.

Los espacios comunitarios también ofrecen conexión a internet gratuita para estudiantes y público general, reforzando el compromiso con el desarrollo educativo local.

Este programa formativo responde a uno de los pilares fundamentales del Plan Municipal de Desarrollo, orientado a disminuir brechas sociales y fomentar oportunidades laborales mediante la capacitación en habilidades prácticas.

Un día memorable que se convirtió en pesadilla

Fiamma Villaverde, una mujer de 29 años, decidió celebrar su cumpleaños este lunes 19 de mayo disfrutando de una película en compañía de su hija de 11 años y un amigo. Mientras se proyectaba Destino Final: lazos de sangre en el Cinema Ocho de La Plata, sufrió un accidente inesperado.

“La verdad es que no teníamos planeado ir al cine -le confía Fiamma a Infobae-. Era mi cumpleaños, estábamos paseando y pasamos por el cine. Como las entradas costaban más baratas que el resto de la semana, dijimos: ‘¿Vamos?’. Entramos, compramos pochoclos y pasamos a la sala. La función recién había empezado“.

Un efecto especial no planeado

El incidente ocurrió cuando la película estaba llegando a su clímax. Entre los efectos de sonido de la película, se escuchó un estruendo que provenía del techo del cine. “Se escuchó un ruido fuertísimo. Al principio pensamos que era parte de la peli, porque estábamos re compenetrados; pero enseguida se me cayó un cascote encima“, recuerda la víctima.

Un trozo del cielo raso se desprendió y cayó sobre Fiamma. “No me pegó en la cabeza porque estaba inclinada sobre el apoyabrazos“, explica la mujer, quien sufrió lesiones en el hombro, la espalda, la rodilla y el tobillo.

Reacción inmediata del establecimiento

Tras el incidente, Fiamma se dirigió inmediatamente a la boletería para solicitar la devolución de su dinero. El personal del cine llamó a una ambulancia y un encargado del lugar intentó llegar a un acuerdo con la afectada. “¿Cómo querés arreglar?“, le preguntó el representante del cine, lo que generó indignación en Fiamma. “Les voy a hacer una denuncia. ¡Mirá si le pegaba en la cabeza a mi hija! ¡Son unos irresponsables!” respondió.

Consecuencias físicas y psicológicas

Aunque los servicios médicos del SAME ofrecieron trasladarla, Fiamma decidió acudir al hospital de Berisso, lugar cercano a su domicilio. “Tenía una bronca… Me hicieron una placa. El diganóstico fue traumatismo por el golpe. Además me salieron varios moretones. En unos días tengo que volver para otra placa en la espalda“.

Las secuelas del incidente no solo fueron físicas. Fiamma confesó que padece ataques de pánico y trastorno de ansiedad. “Estoy con tratamiento psiquiátricio y medicada. Me cuesta estar en lugares donde hay muchas personas. Hacía años que no iba al cine. Fui porque era mi cumpleaños, y mirá lo que me pasó“, lamenta.

Impacto en la vida cotidiana

La joven, quien reside en Berisso y trabaja como empleada de limpieza en un local nocturno, asegura que el incidente ha afectado su vida laboral. “Todavía no hice la denuncia, pero me contacté con un abogado. Hace días que no puedo ir a trabajar. ¿Quién se va a hacer cargo de esto?“, se pregunta con impotencia.

El hecho fue grabado por otros asistentes, donde se observa el hueco en el techo y los escombros en el piso. Algunos asistentes relacionan el desprendimiento con las intensas lluvias recientes. Hasta el momento, el Cinema Ocho no ha emitido una declaración oficial sobre el incidente.