Christopher Landau, vicesecretario del Departamento de Estado de Estados Unidos, manifestó su desacuerdo con un análisis publicado por la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) sobre las relaciones de China con América Latina. “Debo confesar que esta perspectiva la encuentro insólita“, expresó el diplomático.
Posición estadounidense sobre comercio y cooperación
Landau destacó que “la cooperación ofrecida por China ha beneficiado muchísimo más a su base manufacturera que a la de México“. En su respuesta, el funcionario enfatizó la importancia de Estados Unidos como socio comercial para México, con un volumen total de comercio de bienes de 839 mil millones de dólares en 2024, contrastando con los 138 mil millones provenientes de China.
El representante estadounidense también señaló que México mantiene un superávit comercial significativo con Estados Unidos, mientras enfrenta un déficit importante con China. “Y así es en todo el mundo. A nivel global, China tiene el mayor superávit comercial de bienes en la historia de la humanidad“, comentó.
Visión de la UNAM sobre cooperación con China
José Briceño Ruiz, investigador del Centro de Investigaciones sobre América Latina y el Caribe (CIALC) de la UNAM, defendió la cooperación con China, destacando principios de igualdad soberana, pluralidad, apertura y beneficio mutuo. El académico mencionó líneas de crédito por nueve mil 200 millones de dólares para miembros de la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños (CELAC), así como inversiones en infraestructura y cooperación en áreas como energía limpia, telecomunicaciones e inteligencia artificial.
El experto también resaltó beneficios concretos como el otorgamiento de tres mil 500 becas gubernamentales, 10 mil lugares de capacitación en China, 500 becas para maestros chinos internacionales y 300 lugares de formación técnica para alivio de pobreza.
Perspectivas sobre el orden internacional
Briceño Ruiz indicó que el IV Foro China-CELAC representa una oportunidad para América Latina de obtener instrumentos económicos, políticos y diplomáticos que contrarresten las políticas de la administración estadounidense. “En la era Trump 2.0 Latinoamérica es vista como dependiente, subordinada, que no tiene capacidades económicas ni militares para enfrentar las presiones de EUA“, afirmó.
Claudia Edith Serrano Solares, académica de la Facultad de Estudios Superiores Aragón, recordó que el Foro se estableció en 2015 como mecanismo de diálogo para reducir la dependencia exclusiva de Estados Unidos. La investigadora señaló desafíos como las diferencias entre países latinoamericanos en su enfoque hacia China, mencionando casos específicos como Ecuador y Perú.
“Tenemos una vecindad geográfica inmediata con Estados Unidos y no vamos a dejar de negociar con ellos. ¿Cómo lograr balancear el vínculo con este frente al que queremos tener con el gigante asiático y, sobre todo, qué limitantes y candados le vamos a poner? Cambiar de amo no significa ser libre“, decía José Martí”, rememoró la académica.