Desarrollo innovador en análisis emocional

Un equipo de científicos del Departamento de Señales y Comunicaciones de la Universidad de Las Palmas de Gran Canaria (ULPGC) en colaboración con el Instituto Universitario para el Desarrollo Tecnológico y la Innovación en Comunicaciones (IDeTIC) ha creado un modelo computacional capaz de identificar estados emocionales a través de señales biológicas. La investigación, liderada por Nabil Ajali Hernández y Carlos M. Travieso González, se publicó recientemente en la revista científica “Cognitive Computation”.

Metodología y resultados sobresalientes

El proceso comenzó con la presentación de secuencias audiovisuales a sujetos experimentales mientras se recolectaban sus respuestas fisiológicas. El sistema logró identificar con 93.75% de exactitud si una persona sentía temor, rechazo o un estado neutral, empleando sensores de menos de 200 euros que miden parámetros como ritmo cardíaco, oxigenación, temperatura, conductividad dérmica y respiración.

“El nivel de precisión alcanzado iguala o supera a muchos sistemas comerciales actuales, que suelen requerir dispositivos más sofisticados y costosos, como los basados en electroencefalografía (EEG)”, explicaron los investigadores. La metodología combina redes neuronales convolucionales, redes de memoria a largo plazo y una capa de atención para filtrar información irrelevante.

Aplicaciones multidisciplinarias

Este avance tecnológico tiene potencial para transformar diversos sectores. En el área de salud, podría ayudar en la detección temprana de alteraciones cognitivas como el Alzheimer mediante el monitoreo no invasivo de respuestas emocionales.

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En el entretenimiento, permitiría a creadores cinematográficos y anunciantes evaluar objetivamente el impacto emocional de sus producciones. En el sector de videojuegos, posibilitaría experiencias adaptativas que respondan en tiempo real a las emociones del usuario.

En seguridad, el sistema podría prevenir fallos humanos en instalaciones críticas al supervisar continuamente el estado de alerta de los operadores. Las aplicaciones también se extienden a defensa nacional y control de infraestructuras estratégicas.

Formación y proyección científica

El desarrollo se enmarca en el trabajo de investigación doctoral de Nabil Ajali Hernández, quien recibe apoyo de una beca predoctoral de la Agencia Canaria de Investigación, Innovación y Sociedad de la Información (ACIISI). El investigador destacó que este logro posiciona a la ULPGC en la vanguardia mundial del desarrollo de algoritmos de inteligencia artificial.

“Esta investigación alinea a la ULPGC con el trabajo que se realiza en otros laboratorios del mundo donde se está trabajando en todo tipo de algoritmos de IA y consiguiendo grandes resultados; la ULPGC tiene potencial en este ámbito”

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La capital mexicana enfrenta un resurgimiento en delitos relacionados con armas de fuego, incluyendo homicidios y lesiones dolosas, a pesar de la implementación del programa ‘Sí al desarme, sí a la paz’ que fue expandido a otras regiones del país.

Evolución de la violencia en la CDMX

Desde que comenzó el canje de armas por dinero en efectivo, se observó una reducción temporal en la criminalidad. Sin embargo, desde 2024 y durante los primeros meses de 2025, los índices de violencia han vuelto a incrementar. En 2019 se registraron 1,004 homicidios con armas de fuego, que disminuyeron a 446 en 2022, pero subieron nuevamente a 595 en 2024. Las lesiones dolosas también muestran esta tendencia, pasando de 1,425 casos en 2019 a 627 en 2024.

Expansión del programa y críticas

El 10 de enero, la presidenta Claudia Sheinbaum anunció desde la Basílica de Guadalupe la expansión de esta iniciativa a estados prioritarios como Baja California, Estado de México, Guanajuato, Guerrero y Tabasco. “Este programa ‘Sí al Desarme, Sí a la Paz’ va a hacer historia en el país y va a hacer historia también para enseñarlo al mundo entero, que en México estamos construyendo justicia y estamos construyendo paz”, aseguró Sheinbaum. Por su parte, Clara Brugada destacó que “cada arma canjeada en este proyecto representa un delito menos en el país, una vida salvada”.

Evalúan efectividad del programa

Analistas del sector seguridad cuestionan la eficacia real de estas iniciativas para disminuir la disponibilidad de armas ilegales. “Son programas cosméticos que sirven para la foto. Todos los presidentes, sin excepción, todos los jefes de gobierno y gobernadores han tenido alguna versión de este programa”, señaló Víctor Hernández, especialista en seguridad nacional. Para 2025, el programa en la CDMX cuenta con un presupuesto de 6 millones de pesos, de los cuales 5.4 millones se destinarán a incentivos económicos para quienes entreguen armamento.

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Desafío fronterizo y mercado negro

Según estudios de la Secretaría de la Defensa Nacional, alrededor de 2.1 millones de armas han ingresado ilegalmente a México en la última década, principalmente provenientes de Estados Unidos. Francisco Rivas, del Observatorio Nacional Ciudadano, indica que “siete de cada 10 homicidios dolosos se cometen con armas de fuego, y casi el 70% provienen de armerías estadounidenses”. Víctor Hernández propone como solución principal “blindar la frontera con Estados Unidos con la misma intensidad que ellos la blindan de nosotros”, aunque considera improbable su implementación por limitaciones presupuestarias y tecnológicas.

Diagnóstico y propuestas

Los expertos coinciden en la necesidad de abordar múltiples frentes para reducir la violencia armada. Francisco Rivas sugiere “limitar el ingreso de efectivo al país, bloquear esquemas de lavado de dinero, atacar negocios controlados por organizaciones criminales y limpiar instituciones relacionadas con seguridad”. El director del Observatorio Nacional Ciudadano también afirma que “en nuestro país sería imposible cometer la cantidad de delitos y tener los índices de violencia que tenemos si no tuviéramos algún tipo de tolerancia y participación de autoridades”.

Un hito tecnológico sin precedentes se alcanzó en Italia, donde científicos del Instituto Italiano de Tecnología lograron que un robot humanoide realizara un vuelo autónomo utilizando un jetpack. Este logro, considerado revolucionario, marca un antes y un después en el desarrollo de la robótica.

Detalles del robot y su primer vuelo

iRonCub3, el robot protagonista de este logro, pesa 70 kilogramos y está equipado con cuatro motores a reacción estratégicamente colocados: dos en los brazos y dos en una mochila. El aparato logró elevarse 50 centímetros del suelo, manteniendo el equilibrio durante el breve vuelo a pesar de las condiciones aerodinámicas complejas y la presencia de viento.

Desafíos técnicos y soluciones innovadoras

El diseño del robot presentaba grandes desafíos: sus extremidades móviles y estructura alargada lo hacían inherentemente inestable. Para resolver esto, los ingenieros incorporaron una columna vertebral de titanio y materiales resistentes al calor, capaces de soportar temperaturas de hasta 800°C generadas por los gases de escape.

Papel crucial de la inteligencia artificial

El cerebro del robot no está en su hardware, sino en el software. “El verdadero motor del vuelo… no está en el hardware, sino en el software”, afirmaron los investigadores. El sistema utiliza modelos de inteligencia artificial entrenados con datos simulados y reales, lo que permite al robot adaptarse a turbulencias, cambios en su centro de masa y movimientos bruscos en tiempo real.

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Diseño integrado para mayor estabilidad

El equipo de investigación adoptó un enfoque de diseño integral, optimizando tanto la forma física del robot como la ubicación de los motores. Esta combinación de estructura física y algoritmos avanzados permite a iRonCub3 responder rápidamente a entornos cambiantes y mantener su orientación en el aire con gran precisión.

Potenciales aplicaciones prácticas

Más allá de su valor como demostración tecnológica, iRonCub3 tiene un amplio potencial de aplicación práctica. El robot podría ser utilizado en misiones de rescate, exploración de zonas de alto riesgo o tareas donde la intervención humana resulta inviable. Actualmente, los investigadores trabajan en nuevas simulaciones para mejorar el sistema de propulsión y prepararlo para condiciones aún más extremas.