Impacto en pacientes británicos
La **escasez** de un fármaco esencial para trastornos pancreáticos está provocando que individuos en el Reino Unido limiten su ingesta alimenticia a una sola ocasión diaria, según reportes de medios locales. Kreon, medicamento utilizado para facilitar la digestión en personas con condiciones como cáncer de páncreas, fibrosis quística y pancreatitis, presenta disponibilidad en apenas el 4% de las farmacias del país, según datos de la Asociación Nacional de Farmacias (NPA).
“**Los persistentes inconvenientes en el abastecimiento de Kreon han generado consecuencias significativas en quienes lo necesitan para mantener su salud y calidad de vida**”, manifestó Olivier Picard, líder de la NPA. Esta terapia, también conocida como Creon, permite la correcta digestión de nutrientes mediante enzimas pancreáticas que el cuerpo no produce en suficiente cantidad.
Consecuencias clínicas
Cuando los afectados no reciben dosificaciones adecuadas, enfrentan dificultades para alimentarse correctamente. “**Miles de personas con cáncer de páncreas requieren estas pastillas con cada alimento para procesar nutrientes, algo que la mayoría no valora**”, señaló Alfie Bailey-Bearfield, encargado de políticas de salud en Pancreatic Cancer UK, en declaraciones al medio británico The Guardian. La falta de tratamiento adecuado puede dejar a muchos en condiciones críticas que impiden someterse a procedimientos médicos.
La situación ha obligado a muchos a priorizar el consumo del medicamento en comidas consideradas esenciales, dejando de lado otras para conservar sus existencias. “**Es inadmisible que en la actualidad la población deba recurrir a saltarse comidas para administrar sus tratamientos médicos**”, enfatizó Picard.
Origen del desabastecimiento
El fármaco enfrenta interrupciones en su distribución a nivel europeo debido a la complejidad de su producción. Su componente principal, la pancreatina, proviene del páncreas de cerdos, y brotes de peste porcina en zonas productoras han limitado su fabricación. Aunque los brotes se controlaron en 2023, la producción continúa siendo insuficiente.
En España, la Agencia Española de Medicamentos y Productos Sanitarios (AEMPS) reportó en 2024 dificultades para obtener ciertas presentaciones del medicamento. “**El laboratorio responsable realiza una distribución restringida por la escasez de unidades. Existen existencias internacionales disponibles mediante programas especiales para quienes no logren encontrarlo**”, indicó el organismo.
Respuesta gubernamental
El Ministerio de Salud del Reino Unido reconoció la situación y atribuyó el problema a “**limitaciones en la cadena europea de suministro**, junto con escasez de componentes esenciales y restricciones en los procesos industriales”. Señalaron colaboración con el Servicio Nacional de Salud para minimizar el impacto.
Para enfrentar la crisis, las autoridades extendieron hasta noviembre un mecanismo que permite ajustar las dosis recetadas a ciertos pacientes. No obstante, la Asociación Nacional de Farmacéuticos critica que esta solución no aborda la gravedad del asunto. “**Es inaceptable que se adopten estrategias que ponen en riesgo la salud y el acceso a tratamientos de los afectados**”, concluyó Bailey-Bearfield.