Nueva medida fiscal en trámite legislativo
El órgano legislativo de Estados Unidos dio luz verde a una propuesta que establece un recargo del 3.5 por ciento sobre los fondos que los residentes de ese país envían internacionalmente. Esta disposición forma parte de un conjunto de reformas financieras diseñadas para el ejercicio fiscal venidero.
Trámite parlamentario pendiente
De acuerdo con los protocolos de revisión normativa en Washington, ahora corresponde al Senado estadounidense analizar y validar el paquete presupuestario. Los senadores disponen de plazo hasta mediados de otoño para emitir su dictamen.
Reacciones del sector especializado
Analistas del sector financiero han expresado diversas perspectivas sobre los efectos de esta política. Joan Domene, experto en economía internacional, señaló que “el impacto que sí se sentirá en el flujo de remesas captadas en el país, como consecuencia de esta medida no será de uno a uno. Es decir, no habrá una reducción proporcional a la tasa gravada”.
Posibles ajustes operativos
El especialista en mercados transfronterizos Carlos Serrano pronosticó que “los emisores encontrarán canales alternos de envío que no pasan por regulaciones”. Por su parte, Pamela Díaz, analista de dinámicas migratorias, destacó que “ya está tan integrada la fuerza de trabajo de México en Estados Unidos y tan diversificada respecto a lo que teníamos antes de la pandemia, que esto hace un poco más resilientes los envíos”.
Antecedentes de costo en transferencias
El debate sobre el costo de las remesas incluye referencias históricas. Durante las últimas dos décadas, usuarios han enfrentado tarifas superiores a las actuales. Como recordó Serrano: “Hace 20 años los emisores pagaban 40 dólares por las comisiones de remesas y aún así las enviaban”.