Posibles consecuencias del gravamen propuesto
La posible implementación de un impuesto del 5% en Estados Unidos sobre las remesas provenientes de personas no ciudadanas estadounidenses podría desencadenar un resurgimiento de métodos alternativos para el traslado de fondos, advierten expertos. Entre las opciones que se pondrían en práctica destacan el uso de intermediarios conocidos como encomenderos y la utilización de activos digitales.
“El flujo de remesas continuaría utilizando canales no convencionales como los mencionados intermediarios y las monedas virtuales, incrementando los costos y riesgos para quienes realizan estas transferencias”, declaró Gabriela Gutiérrez Mora, líder de la institución dedicada al análisis financiero.
Detalles del análisis técnico
De acuerdo con información proporcionada por la edición digital de una reconocida revista especializada en temas económicos, el tema comenzó a discutirse en el Congreso estadounidense la semana anterior. Esta propuesta afectaría incluso a individuos con permiso de residencia que cumplen con sus obligaciones tributarias en ese país.
Víctor Manuel Herrera Espinosa, encargado del comité encargado de análisis económicos, señaló que los migrantes continuarán enviando recursos desde Estados Unidos, “pero ya no por los métodos convencionales, sino mediante intermediarios que transportan efectivo entre fronteras”.
El experto detalló el funcionamiento de este sistema: “Los intermediarios acuden al aeropuerto a recibir los fondos, los transportan en efectivo hasta México respetando los límites legales de declaración aduanal, y cobran una tarifa por entregarlos a los familiares en el país”.
Impacto regional y económico
Según datos proporcionados por la fuente periodística, existen regiones donde estas transferencias representan una proporción significativa del producto interno bruto estatal, particularmente en entidades como Oaxaca, Zacatecas, Michoacán, Guerrero y Chiapas.
La presidenta del instituto especializado enfatizó que “la aprobación de esta medida reconfiguraría el mercado de remesas que se ha desarrollado en Estados Unidos” y destacó la desigualdad en el tratamiento fiscal entre diferentes grupos de migrantes.
Señaló además que comunidades enteras dependen de estos ingresos: “Representan el 24% del PIB de un país centroamericano y más del 3% del PIB de naciones como India y México”.