Judicial
Conductor señalado por mortal choque navideño en A Coruña responsabiliza a víctima fallecida
En un juicio desarrollado en la sección segunda de la Audiencia Provincial de A Coruña, el acusado de causar la muerte de un matrimonio en un accidente del 24 de diciembre de 2020 enfrenta cargos por dos delitos de homicidio culposo grave. La defensa argumenta que el siniestro ocurrió por la aparición repentina de otro vehículo en la avenida Finisterre, bajo condiciones climáticas adversas, lo que impidió cualquier maniobra evasiva.
Argumentos de defensa y testigos
“Es un accidente que tiene lugar una noche de lluvia, con luz artificial, en la que un vehículo se cruza en la trayectoria de otro, en el propio cruce”, afirmó el abogado del procesado. Tanto su pareja como el hijo de esta, presentes en el automóvil en el momento del incidente, coincidieron en señalar que “nadie podía circular rápido porque íbamos en caravana”, agregando que “estaba oscuro y llovía mucho”, hasta el punto de “no distinguir el vehículo porque no se veían ni las luces”.
Versión oficial y testimonios contrarios
Contradiciendo estas declaraciones, un oficial de tránsito que arribó primero al lugar informó que la circulación era “escasa y fluida” en el momento del percance. Un hijo de las víctimas, quien transitaba en otro automóvil detrás de sus padres, describió al acusado como “prácticamente impasible” tras el impacto.
Reconstrucción del siniestro
Según la fiscalía, el vehículo donde viajaban los fallecidos intentaba realizar un viraje prohibido cuando fue embestido frontalmente por el automóvil conducido por el imputado. El hombre de 68 años falleció horas después del choque, mientras que su esposa de 67 años perdió la vida instantáneamente.
Sanciones solicitadas
La acusación pública pide cinco años y medio de prisión por homicidio imprudente y ocho años sin licencia de manejo, mientras que la parte querellante solicita una pena más severa: 15 años y medio de cárcel y 24 años sin poder conducir. El Ministerio Público también señaló que el acusado circulaba a 125 km/h en una zona con límite de 50 km/h, aunque la defensa sostiene que “la circulación era lenta y en caravana en los dos sentidos”.