Con el Mundial de 2026 a la vuelta de la esquina, México se apresta a convertirse en el primer y único país en la historia en albergar en tres ocasiones el prestigiado torneo, a pesar de no haber logrado ganarlo nunca.
Experiencia histórica y emocional
Tras más de medio siglo desde la primera organización del evento en suelo nacional, el próximo año marcará un hito al sumar una tercera participación como sede, consolidando así la tradición futbolística del país. Los recuerdos de anteriores ediciones siguen frescos en quienes vivieron de cerca la emoción del campeonato.
Testimonio de un héroe del Mundial 86
Fernando Quirarte, antiguo defensa de la Selección Mexicana, compartió su experiencia al jugar en casa durante el Mundial de 1986, un evento que se convirtió en un símbolo de esperanza y unidad para el país tras el trágico sismo del año previo en la Ciudad de México.
«La gente que no ha experimentado un Mundial en México no sabe lo que va a vivir. A pesar de que no serán muchos partidos, será una fiesta futbolística. Lo que nosotros vivimos en la cancha es diferente, hay que vivirlo para sentirlo. Los aficionados que no lo han vivido van a saber entonces de lo que estoy hablando, no pueden imaginarse lo que se va a vivir».
El llamado «Sheriff» resaltó la energía especial que se vive al competir bajo el apoyo de su propia afición. Recordó con emoción el primer partido contra Bélgica en el Estadio Azteca, donde los seguidores clamaban por una victoria que representara una catarsis colectiva tras la tragedia del terremoto.
«Fue una gran oportunidad estar en un Mundial en mi País. Si estar fuera de México en un partido internacional sientes muy bonito cuando tocan el Himno Nacional, ahora imagínate con tu gente, con la situación que había pasado del terremoto. Y lo recalco porque fue algo muy especial. Cuando nos toca el primer partido, y cuando cae el primer gol, que me tocó hacerlo, gracias a Dios, mi emoción al gritar el gol lo sentí como un desahogo por todo lo que había pasado. Otro momento importante fue cuando, a los 5 segundos de que había iniciado a tocarse el Himno Nacional, hubo una falla técnica en el sonido del Estadio, y 120 mil personas siguieron cantando, y nosotros también. Eso me sigue emocionando».