Designación como amenaza transnacional
El gobierno de Estados Unidos aprobó medidas restrictivas contra un grupo operativo vinculado al Cártel de Sinaloa, clasificándolo bajo la categoría de amenaza terrorista internacional. Esta acción se enmarca en las estrategias de combate al narcotráfico interestatal promovidas por la administración Trump.
Bloqueo de recursos financieros
De acuerdo con información oficial, se ordenó la congelación de bienes y activos pertenecientes a esta organización delictiva ubicados en territorio estadounidense. Además, se estableció una prohibición generalizada para que ciudadanos de ese país mantengan cualquier relación comercial o financiera con los sancionados.
Acusaciones por distribución de sustancias sintéticas
La secretaría del Tesoro indicó que la organización fue señalada por su participación en la producción y comercialización de fentanilo, sustancia que ha generado una crisis sanitaria en varias regiones de Estados Unidos. “Los Chapitos son una rama poderosa e hiperviolenta del Cártel de Sinaloa que lidera el tráfico de fentanilo en Estados Unidos”, señaló el titular de esa dependencia.
Impacto en liderazgo criminal
Entre los afectados por estas medidas se encuentran dos individuos considerados como cabecillas del grupo, quienes además son hijos del conocido narcotraficante Joaquín Guzmán Loera. El comunicado oficial también destacó el compromiso del gobierno estadounidense con “detener la crisis del fentanilo y ayudar a salvar vidas”.
Acciones coordinadas con estrategias anteriores
Esta determinación se suma a otras acciones similares implementadas anteriormente contra organizaciones criminales, incluyendo al Tren de Aragua y otras fracciones del Cártel de Sinaloa. El mandatario estadounidense había instruido evaluaciones sobre posibles designaciones de grupos criminales como organizaciones terroristas desde el inicio de su gestión.