Once exmilitares colombianos enfrentan prisión preventiva oficiosa después de que un juez de control los vinculara a proceso por su presunta participación en un atentado con artefactos explosivos contra efectivos del Ejército mexicano. El incidente, ocurrido en mayo pasado en la frontera entre Michoacán y Jalisco, resultó en la muerte de ocho soldados.
Desarrollo del caso judicial
El proceso legal se definió tras una audiencia de 20 horas llevada a cabo en el Centro de Justicia Penal Federal de Michoacán, con sede en Morelia. Durante el procedimiento, el juez validó las evidencias presentadas por la Fiscalía General de la República (FGR), relacionadas con el delito de violación a la Ley Federal de Armas de Fuego y Explosivos.
Lugar de detención y contexto del operativo
Los acusados, que habrían llegado a México durante el año anterior, fueron trasladados al CEFERESO Número 17, ubicado en Buenavista Tomatlán, región de la Tierra Caliente michoacana. La detención ocurrió a finales de mayo en Los Reyes, Michoacán, donde fuerzas federales capturaron a 17 presuntos integrantes de grupos delictivos, de los cuales once correspondían a exmilitares colombianos.
Elementos decomisados y versión oficial de Colombia
Entre los objetos asegurados durante el operativo se encontraban imitaciones de armas largas, cargadores, cartuchos y 41 dispositivos explosivos, además de una caja con material detonante, pólvora negra, equipamiento balístico y táctico. El Ministerio de Relaciones Exteriores de Colombia confirmó que 12 ciudadanos de ese país están detenidos, de los cuales once tuvieron participación en instituciones militares colombianas.
Alerta sobre mercenarios extranjeros
“Un creciente fenómeno de cooptación de personal con formación militar para integrar estructuras criminales, sirviendo como mercenarios”, señaló la cancillería colombiana, destacando la preocupación por el reclutamiento de exmilitares en actividades ilícitas.