Despedida de un icono de la televisión latinoamericana
El icónico intérprete colombiano Kepa Amuchastegui, famoso por dar vida al personaje de “Roberto Mendoza” en la telenovela internacionalmente aclamada “Yo soy Betty, la fea”, falleció a los 83 años de edad. La noticia fue confirmada por sus familiares directos a través de una publicación en sus plataformas digitales, donde expresaron: “El 27 de mayo, a las 11:11 pm, ha fallecido nuestro amado Kepa Amuchastegui. Se nos fue, con un respiro lento y sereno, esta bellísima persona. Lo recordaremos siempre con mucho amor”.
Diagnóstico y batalla contra el cáncer
El artista había revelado públicamente su situación de salud el 28 de abril mediante sus redes sociales, indicando que había recibido diagnóstico de cáncer de vejiga y que suspendería sus actividades profesionales para iniciar un proceso terapéutico. La enfermedad se descubrió tras presentar sangrado en la orina y encontrar durante estudios médicos que solo contaba con un riñón funcional.
Tras una serie de análisis posteriores, los galenos le presentaron tres opciones terapéuticas que finalmente no resultaron viables: cirugía invasiva, quimioterapia y radioterapia. La primera fue descartada por la complejidad del procedimiento y la recuperación prolongada que su organismo no toleraría; la segunda por los riesgos asociados a su único riñón; y la tercera por posibles daños irreversibles a otros órganos.
Tratamiento elegido y últimos momentos
Finalmente, optó por la inmunoterapia, un enfoque menos agresivo que, según explicó, “consiste en despertar mi sistema inmunológico adormecido por el cáncer, para que este, el sistema inmunológico, se encargue de combatir el tumor. No lo cura, pero sí detiene, en el mejor de los casos, su crecimiento y posibles metástasis. Tiene no pocos efectos secundarios, pero he decidido someterme a dicha inmunoterapia”.
El intérprete también hizo un llamado a sus admiradores solicitando apoyo económico, considerando que su condición le impediría continuar trabajando en sus actividades artísticas: “no podré seguir percibiendo dinero, es por esa razón que acudo a los que me han seguido durante todo este tiempo y a aquellos que buenamente quieran, para que me colaboren con su ayuda”.
Legado y familia
Su partida deja un vacío en la industria artística y en el corazón de sus seres queridos. Dejan huérfanos a su cónyuge Bellien Maarschalk, sus hijos lona y Unai, su yerno Erwin, su nuera Ana María, y sus descendientes directos Gorka, Okariz, Rubén y Anika. El cuerpo del actor será sepultado en Bogotá, su ciudad natal en Colombia.
