El simbolismo del tigre en la política mexicana
Andrés Manuel López Obrador utilizó en 2018 una metáfora poderosa durante su campaña electoral: “si no me reconocen la victoria, soltaré al tigre de la inestabilidad”. Ahora, esa fiera parece haber salido de su jaula, pero en esta ocasión no se trata de una amenaza retórica, sino de la Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación (CNTE), que se ha convertido en un actor impredecible en el escenario político actual.
El conflicto magisterial y sus implicaciones nacionales
La sección 22 del SNTE en Oaxaca, junto con fracciones de otras secciones magisteriales, ha transformado a la CNTE en un “foco de insurrección social en modo de insurgencia popular”. Esta organización no solo busca beneficios laborales, sino que también mantiene vínculos con grupos relacionados con la guerrilla del EPR. Su presencia está generando una inestabilidad que podría afectar profundamente el proceso electoral judicial en la Ciudad de México.
La conexión internacional del conflicto
El escenario electoral en México no pasa desapercibido para Estados Unidos. Washington “está revisando con microscopio la infiltración del crimen organizado en los niveles de jueces, magistrados y ministros”, algo que preocupa especialmente a la Casa Blanca en relación con la próxima renegociación del Tratado de Comercio Libre de América del Norte (T-MEC). El gobierno estadounidense no aceptaría que autoridades con vinculaciones delictivas formen parte de los poderes judiciales responsables de tratos internacionales.
La negociación entre el gobierno y la CNTE
La negociación en Bucareli parece enfocarse en un objetivo primordial: “buscar el compromiso de la CNTE de reducir sus movilizaciones urbanas para tranquilizar el nerviosismo social y permitir la realización de las elecciones judiciales”. Sin embargo, la decisión final parece depender de una sola persona: López Obrador, quien desde su rancho en Palenque tendría el poder de contener al movimiento magisterial si así lo decidiera.
El legado y la herencia política de López Obrador
La consolidación de la CNTE como fuerza política se remonta a 2018, cuando López Obrador y su candidata a jefa de gobierno de la Ciudad de México, Claudia Sheinbaum, apoyaron y potenciaron a la coordinadora disidente de maestros como una amenaza a la estabilidad electoral. Ahora, esa estrategia parece haberse convertido en un boomerang que podría afectar el proceso electoral judicial que se avecina.
El dilema del Palacio de Invierno
La gran incógnita radica en la voluntad de López Obrador: “si dejará que el caos magisterial reviente la elección judicial o intervendrá para contener la situación”. El destino de las elecciones judiciales en la Ciudad de México parece estar en manos de una decisión que podría llegar desde el Palacio de Invierno en Palenque, mientras la jefa de gobierno, Clara Brugada, enfrenta una situación compleja en las calles de la capital.