Legado familiar en el ring
El luchador Magnus, integrante del Consejo Mundial de Lucha Libre, manifestó su satisfacción por continuar con la tradición deportiva de su familia. Reconoció sentirse privilegiado de llevar el apellido Salazar dentro de las arenas, aunque expresó su deseo de haber presenciado en acción a su padre Tony Salazar, figura icónica del pancracio mexicano.
Memorias de infancia y reconocimiento público
“En casa siempre hubo elementos de lucha libre como máscaras y juguetes”, recordó el gladiador. El hijo de Tony Salazar destacó que los pocos recuerdos gráficos que posee de su progenitor están relacionados con el deporte, y mencionó con emoción las experiencias de ver a su padre reconocido en las calles incluso después de su retiro.
De la resistencia a la guía paterna
El integrante de la Arena México reveló que inicialmente enfrentó la oposición de Tony Salazar respecto a su decisión de convertirse en luchador profesional. Sin embargo, esa postura cambió al observar su dedicación en los entrenamientos, situación que derivó en una relación de mentoría entre ambos. “Es un deporte que te da mucha felicidad, pero te aleja de la gente que amas”, afirmó citando las palabras que marcaron su formación.
Compañerismo diario en CMLL
Actualmente, Magnus valora la cercanía que ha logrado con su padre gracias a su participación en las actividades del Consejo Mundial de Lucha Libre. “Ahora veo más a mi papá que cuando era niño”, expresó el gladiador, quien destacó la labor de Tony Salazar con nuevas generaciones y agradeció contar con su presencia constante en su trayectoria profesional.