La subida de temperaturas durante los periodos cálidos activa un proceso biológico que incrementa la reproducción y movilidad de diversas especies de insectos. El calor acelera su ciclo vital y metabolismo, generando mayor actividad en cucarachas, moscas, hormigas y chinches.
Especies problemáticas en temporada de calor
Entre los artrópodos que más proliferan destacan las cucarachas de drenaje, que encuentran en espacios como postes, árboles huecos y banquetas levantadas entornos favorables para su desarrollo. Las moscas también representan un desafío por su capacidad reproductiva: en apenas un mes pueden depositar más de 500 huevos. Las hormigas y chinches completan este grupo por su búsqueda intensificada de alimentos, humedad y ambientes cálidos.
Recomendaciones para prevención
Los especialistas en manejo de plagas sugieren instalar mallas en coladeras para evitar la salida de cucarachas desde drenajes. “Colocar mosquiteros en puertas y ventanas” se presenta como medida efectiva para reducir riesgos de enfermedades como el dengue.
Se enfatiza la importancia de no almacenar residuos dentro de viviendas ni en áreas que puedan atraer roedores. “Mantener limpios pisos y superficies” se establece como práctica fundamental para eliminar restos alimenticios que favorezcan la reproducción de hormigas en interiores.